Abogacía preventiva
Todos tenemos claro que en lo relacionado a la salud más vale prevenir que curar. Desde Bufete Manotas tenemos el deber para con la sociedad de concienciar acerca de los peligros que puede conllevar no recibir asesoramiento legal de manera preventiva. Hoy, en nuestro blog os damos algunos consejos de por qué la abogacía preventiva promueve la buena salud jurídica.
¿En qué consiste la abogacía preventiva?
Seguramente todos los años nos realicemos chequeos médicos o vayamos al dentista para asegurarnos que nuestra dentadura está en perfecto estado. De la misma manera, podemos acudir a recibir asesoramiento jurídico con carácter previo con la finalidad de reducir o mitigar las probabilidades de un conflicto.
La abogacía preventiva consiste en anticiparse a una situación que aún no ha surgido, de esta manera se pueden sopesar las dificultades que se pueden encontrar. Hoy en día no dejamos de ver en los informativos procesos judiciales que podrían haberse evitado si contasen con una asesoría jurídica o información legal. Vivimos en una sociedad muy reglamentada y el conflicto jurídico puede aparecer incluso sin haber participado en él de manera explícita, por eso es fundamental buscar consejo jurídico antes de emprender muchas actividades de nuestro día a día. Así, evitaremos problemas legales futuros.
¿Cuándo es necesario acudir a la abogacía preventiva?
En el ámbito empresarial es de suma importancia acudir a un abogado con bastante frecuencia. Imaginemos que vamos a montar una sociedad o empresa, ¿qué forma societaria le voy a dar? ¿Cuáles son los órganos de gestión de la empresa? ¿Quién es el responsable o qué significa ser el administrador de la empresa y cuáles son sus obligaciones? ¿Qué es el Libro de Actas? ¿Cómo redacto los Estatutos? ¿Qué exige la ley en cuanto a prevención de riesgos? ¿Cómo sé si estoy cumpliendo la Ley de Protección de Datos? ¿Si tengo una web, qué obligaciones legales he de cubrir? Y así, podríamos seguir con un sinfín de preguntas que todo empresario ha de hacerse antes de emprender su negocio. En esto ayuda la abogacía preventiva, que consiste en informarse, planificar y evitar responsabilidades innecesarias, costes no previstos y resultados indeseables de cualquiera de nuestras acciones.
El mapa empresarial español está formado por un 85% de PYMES, pequeñas y medianas empresas que por lo general se enfrentan a las mismas obligaciones que las grandes empresas o multinacionales. Nuestra experiencia nos ha hecho ver que una de las principales características que comparten la mayoría de las pymes, es la carencia de formación esencial en aspectos legales. Por ello es importante que un abogado nos aconseje y nos ayude a realizar un mapa estructurado de todos los aspectos legales y de la normativa que hemos de cumplir al crear una sociedad o emprender un negocio.
¿Qué beneficios tiene la abogacía preventiva?
El primero es el ahorro de costes económicos que supone. Por ejemplo, una empresa que quiere instalar cámaras de seguridad en su entorno empresarial y acude a una consulta de asesoría jurídica se estará ahorrando mucho dinero. Si por el contrario no acude e incumple algún aspecto de la legislación tendrá que hacer frente a sanciones de la Agencia Española de Protección de Datos y a unos honorarios de los abogados más elevados que si hubiera acudido en su momento a un despacho de abogados.
Si eres empresario debes tener en cuenta que por muy honrado que seas no puedes poner la mano en el fuego por tus empleados/as. La empresa podrá tener responsabilidad penal también por actuaciones de sus empleados, por eso es importante anticiparse e informarse acerca de qué procedimientos son los mejores para evitar conflictos y problemas. En este sentido, una figura que está entrando con fuerza en el panorama empresarial español es el de compliance, una figura que garantiza que la empresa, sus directivos, empleados y agentes vinculados, cumplen con el marco normativo que se le aplica a la empresa.
Los Tribunales en nuestro país están saturados, por eso un litigio puede conllevar años y años hasta que se resuelva, con el desgaste psicológico y emocional que conlleva estar arrastrando un conflicto legal durante tanto tiempo.
Desde Bufete Manotas aconsejamos acudir a la asesoría profesional de manera preventiva. Situaciones tan habituales como un divorcio, la firma de un contrato hipotecario o problemas laborales pueden ser solucionados de manera preventiva. Recuerda que anticiparse a los conflictos legales te evitará muchos dolores de cabeza.
¡Nos vemos en las redes!